Una noche de sorpresas en la vuelta del Luna Park

En la vuelta de la actividad pugilística al Estadio Luna Park, la catedral del boxeo argentino, Débora Dionicius se consagró campeona mundial interina de la categoría pluma en la versión de la OMB, al vencer con claridad a Marcela Acuña.

Fueron diez vueltas en las que la Tigresa no pudo captar a su presa. Con menor alcance y altura, pero mucha mayor velocidad, el plan de la entrerriana fue cumplido sin fisuras: todo el tiempo entraba, uno o dos toques y salida inmediata, con una excelente traslación lateral. Acuña fue al frente en toda la pelea, y nunca pudo hacer valer su estrategia, ni meter sus manos favoritas, sobre todo el directo de derecha.

A poco de comenzada la pelea, un golpe de la Gurisa dejó el ojo izquierdo de Acuña marcado, y éste se fue inflamando, lo que seguramente afectó a la formoseña. En una pelea muy estratégica, las tarjetas dieron una ventaja de 3 ó 4 puntos para la ganadora. Nuestro resultado era 97-93 para la nueva campeona. El título interino en juego se hallaba vacante, y la campeona regular es nada menos que la portorriqueña Amanda Serrano, una de las mejores kilo por kilo. El récord de la boxeadora entrerriana es de 32 victorias (6 KOs) y 3 derrotas, y ya había sido campeona del mundo FIB súper mosca entre 2012 y 2018.

El árbitro de la contienda, el veterano Rodolfo Stella, anunció que ésta fue su última pelea como tal.

En el semifondo, el campeón argentino de los gallos, Angel Nicolás Aquino, noqueó espectacularmente al titular sudamericano Kevin Muñoz, quien en principio era el favorito y de esta forma dejó su invicto. En juego estaba el título latino FIB que se hallaba vacante. Tras un desarrollo cambiante, pero que le era favorable gracias a su mayor potencia, el de Olivos logró una definición terminante en el quinto round mandando a la lona por toda la cuenta al mendocino con un preciso cross de izquierda. Kevin Muñoz no pudo hacer valer su prolijo estilo boxístico, ya que cuando parecía prevalecer, un golpe del ganador lo desestabilizaba. El récord del nuevo campeón es de 9 victorias (4 KOs), 4 derrotas y 1 empate.   

En otro combate titular, el bonaerense Braian Suárez obtuvo la corona OMB latina de los medio pesados, al vencer por nocaut técnico en el tercer round al colombiano Juan Boada. Sin perder la línea, la potencia de Suárez fue demasiado para el boxeador visitante que tras ser alcanzado por las primeras manos del vencedor, no logró responder ni siquiera para huir de la zona de peligro. Tras dos caídas en el segundo round, apenas comenzado el tercero, el rincón tiró la toalla al mismo tiempo que el árbitro decretara el KOT.

El argentino ya llega a un impresionante récord invicto de 16 victorias (15 KOs) y pide pista en el terreno internacional.  

En otra pelea, el ascendente tucumano Rodrigo Ruiz venció por nocaut técnico al marplatense Germán López, en pelea encuadrada en los súper gallos. La superioridad de vencedor fue total, haciendo valer su potencia, derribando en el primer round a su rival. Cuando parecía que la contienda llegaría a las tarjetas, en el sexto volvió a mandar a la lona al perdedor quien se levantó a los ocho segundos, pero increíblemente el árbitro no lo dejó seguir cuando faltaban tres segundos para el campanazo final.  

Fotos: TyC Sports